Mi mejor deseo…
Llega la Navidad y aunque haya quien quiere verla como momento de consumismo, o una época triste, prefiero sentirla como esa época especial del año, en la que al menos en intención, queremos ser mejores, y deseamos el bien a los demás.Es cierto que hay momentos en los que te sientes triste, porque tu Navidad no es de película, pero hemos de ser positivos, ser capaces de sacar lo mejor de nosotros y compartirlo. Al final compartir es lo que realmente nos hace felices.
Me encantan esos días en los que el centro de Granada se llena de luz y color. Me gusta que huela a castañas asadas, a garrapiñadas. Los puestos de dulces de las monjas. Plaza Bib-Rambla llena de niños que quieren algodón dulce, mientras sus ojos reflejan ilusión y magia inocente. Hacer la Ruta de los Belenes por los escaparates de esos comercios que se engalanan guardando en su interior esa joya que necesitamos buscamos para alegrar algún corazón. Sentir el frío en la cara, esa sensación de libertad y cuestionarme si utilizo orejeras y gorro calado hasta la nariz, o si me enredo en una bufanda que me tape la boca.
Investigar, buscando ese detallito con el que conseguir una sonrisa. No se trata de gastar, se trata de encontrar lo que trasmita “tú me importas”. Recuerda que en cualquier tiendita de cualquier barrio puedes encontrar ese tesoro.
Muestra tu mejor sonrisa, vive con el deseo de que las cosas sean un poquito mejor para todos, siendo cada uno de nosotros, nuestra mejor versión. Para ser feliz, hay que querer ser feliz y disfrutar de lo que tengo, sin estar continuamente pensando en lo que no tengo.
Por eso, para esta Navidad, mi mejor deseo eres tú…
Viajando Con Esnupi