¿Te crees inmune a Cupido?
Antes de leer el siguiente artículo debemos aceptar algo, y es que el amor, queramos o no, existe.
Unos se empeñan en racionalizarlo explicando complejos procesos químicos, que al parecer, fluyen como un torrente en nuestro cerebro; y otros, la mayoría, nos limitamos a vivir la experiencia amorosa con una venda en los ojos, la cual a veces nos hace estamparnos con la realidad. Sin embargo, hay algo innegable, y es que este sentimiento es uno de los más poderosos en el ser humano y que justamente por eso, desde que el hombre tiene consciencia de sí mismo, no ha parado de estudiarlo con el fin de encontrar una fórmula exacta que nos lleve o nos libre de él.
¿Eres de los que se creen inmunes a Cupido?
Sentimos decirte que te equivocas porque el pequeño angelote está en todas partes, otra cosa muy diferente es que Hollywood nos haya inculcado sólo su cara más famosa y romántica, esa de dos personas que se conocen y caen rendidas al instante, pero qué va, esta faceta se queda muy corta, y es que el amor campa a sus anchas por el aire. Cuando abrazas a tu mejor amigo, cuando tu perro da saltos de alegría al escuchar las llaves abriendo la puerta de casa, o cuando tu madre te pregunta qué tal el día, ahí hay amor, y además del bueno, de ese que dura toda vida y que no tiene forma de rosas ni calóricos bombones, sino de sonrisa y brillo en los ojos.
Y dirás… vale, ¿Pero y mi media naranja?
Pues bien, lo mejor es que te olvides de los cítricos y demás utopías populares, porque podrías acabar chupando limones. A lo mejor no te has dado cuenta, pero la naranja entera eres tú, así que no caigas en estereotipos de revista y despierta tus cinco sentidos, así cuando llegue esa persona tan especial sabrás reconocerla sin equivocarte.
María Herrera de Tavola News