Está claro, el big data será el oro del futuro, si no lo es ya. Las empresas pagan por él y mantienen una guerra silenciosa por ver quién tiene más información de los consumidores en su poder. Pero ¿Por qué es el big data y por qué es tan codiciado?
¿Qué es el big data?
Según el «Dios Wikipedia» el Big data es la gestión a través de la tecnología de inmensos conjuntos de datos de cada individuo de la sociedad. Desde los datos demográficos más obvios, hasta las características psicológicas y hábitos más sofisticados de cada perfil. ¿Te imaginas que pasaría si cayera en manos de los departamentos de Marketng de las empresas más poderosas del mundo?
Posiblemente no notaríamos nada, simplemente ciertas mejoras en el día a día, por ejemplo en los atascos, en las colas, en las sugerencias en internet… o sea que no nos daríamos cuenta, pero las empresas sabrían más de nosotros que nuestra propia madre.
El big data en el ocio y turismo
Desde que las agencias y buscadores de viajes online empezaron a lanzar ofertas a destinos de ensueño, a comparar precios y darnos la opción de diseñar nuestras vacaciones; los paquetes turísticos predeterminados, las agencias tradicionales y los viajes organizados cayeron en picado.
La personalización del servicio al usuario era la clave del éxito ¡No a los rebaños de turistas!
De hecho, las empresas de servicios son las que más se están beneficiando del boom del big data para ofrecer al cliente final un producto perfectamente ajustados a sus gustos y necesidades. Eso sí, no te van a preguntar directamente, para eso ya esta el Inbound Marketing que con el contenido más original acabará convenciéndote para que contestes algunas «preguntillas tontas»
Por ejemplo, algunas conocidas cadenas hoteleras españolas como Room Mate, High Tech, Iberostar o Zenit Hoteles, se han centrado en conocer a su público para conseguir fidelización y una buena reputación. Por ejemplo, a través de aplicaciones que permitan al huésped hacer valoraciones en tiempo real sobre el servicio, sensores que detectan la temperatura ideal de los viajeros según edades y nacionalidad o programas de puntos que dan ofertas en sitios turísticos a cambio de una suscripción… y así podríamos quedarnos mencionando ejemplos hasta mañana.
Además, aparte de beneficiar a la empresa, hay que admitir que también es un buen cambio para el usuario, porque puede participar activamente, hacer oír sus preferencias y tener mayor transparencia a la hora de tomar decisiones. Cuando se abre un canal de comunicación bidireccional entre usuario y empresa, esta también tiene que tener en cuenta que podrán salir a la luz sus intenciones.
¿Estás pensando el emprender en el sector turístico? Estas son las ventajas del big data
- Segmentación detallada del público objetivo.
- Anticipación a las necesidades del cliente.
- Personalización del producto.
- Seguimiento de la huella digital de los usuarios para su seguimiento.
- Encontrar nuevas oportunidades en el sector turístico.
- Poner a disposición del viajero la tecnología 2.0 para completar su experiencia.
- Transformación interna de la empresa
¿Y qué pasa con el big data en el turismo español?
Si solo hablamos de turismo, Organización Mundial del Turismo (OMT) sitúa a España como tercer país en número de turistas extranjeros recibidos por detrás solo de Francia y Estados Unidos. Lo que casi nos obliga a estar constantemente innovando para mantener este puesto. No solo nos referimos a las grandes ciudades, sino que los municipios más pequeños y turísticos también tienen que ponerse las pilas si quieren seguir en este top ten. Para esto, el uso del Big Data es la clave.
Imagina que llegas a la pedanía más recóndita y pintoresca de España, y que nada más entrar, en tu móvil salta una notificación preguntándote qué quieres comer hoy, o mejor aún, recomendándote la gastronomía típica del lugar ¿Te gustaría? Seguro que sí. Es entonces cuando ese lugar pasaría de ser un pueblecito con encanto a un pueblecito con encanto muy pro.
En la actualidad, SEGITTUR (Sociedad Estatal Española para la Gestión de la Innovación y las Tecnologías Turísticas) está desarrollando un proyecto piloto de “sistema de inteligencia turística” pionero en el mundo, el cual ya está probándose en ciudades como: Las Palmas de Gran Canaria y Badajoz. Básicamente consiste en que el ayuntamiento de cada ciudad sepa su volumen de turistas, de dónde vienen, edades intereses y en qué sectores invierten más su presupuesto vacacional. Seguro que miden un montón de más datos pero por lo pronto, con esto es suficiente para quedarnos con la boca abierta.
¿Conclusión?
Aunque el big data sea toda una oportunidad de negocio, aún queda el reto más grande de todos, saber cómo gestionarlo y cómo conseguir una información transparente y de calidad sin que las empresas sobrepasen los límites legales de la intimidad de los individuos.
A nosotros desde luego, no nos importaría dar algún que otro dato siempre y cuando nos diseñaran de principio a fin las vacaciones de nuestros sueños ¿Y a ti? 😋
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