¿Quiénes son las estatuas del bulevar de Constitución? Aunque están en pleno centro de Granada, no todas son fáciles de identificar a primera vista. Los protagonistas se ven reflejados en un total de 11 estatuas de bronce, conservando la huella de algunos ilustres granadinos que nos dejaron historias inconfundibles… Aunque, aún así, las leyendas urbanas han cambiado la identidad de alguna estatua: ¿sabías que la conocida estatua de Colón no es Colón?
Te contamos la historia de 5 de ellas:
Manuel de Falla: Manuel de Falla es posiblemente el compositor español más laureado de nuestro país y una de las figuras más destacadas de la historia granadina. Destacó en el estilo llamado “nacionalismo musical”; el conjunto de composiciones basadas en melodías y ritmos populares de cada región. Su nombre hoy permanece en uno de los edificios más representativos de la música granadina: el Auditorio Manuel de Falla.
Manuel Benítez Carrasco: Nacido en el corazón del Albayzín, pronto percibió la belleza de su tierra y se convirtió en un poeta reconocido a una edad muy temprana. De él aún se recuerda la tesitura de su voz, con la que recitó versos llanos y amigables sobre Granada y sus viajes por Sudamérica.
Eugenia de Montijo: Elena fue hija de un aristócrata español que había luchado en el banco francés. Granadina de nacimiento, Eugenia fue avisada en el Sacromonte de que algún día sería “más que una reina”. Años después, esa predicción se hizo realidad al casarse con nada menos que Napoleón Bonaparte, quizá el único hombre en el mundo que podía darle ese título casi perteneciente a un cuento. Eugenia trascendió como “la emperatriz de la moda”, ya que su mayor pasión fue descubrir la moda francesa y dedicarse a coleccionar enormes cantidades de zapatos, vestidos, joyas y complementos de la época.
Elena Martín Vivaldi: poetisa e hija predilecta de Granada, Elena Vivaldi es considerada el enlace entre la generación del 27 y la poesía de épocas posteriores. Su último deseo fue que toda su obra quedara legada a la Universidad de Granada y la Fundación Jorge Guillén, donde hoy se pueden comprobar sus escritos de forma digital. Su estatua sujeta un libro entre las dos manos, en el que se puede leer un grabado: “serena de amarillos tengo el alma”, uno de sus versos más reproducidos.
María La Canastera: María Cortés Heredia fue una bailaora gitana mundialmente conocida como “María La Canastera” por ser hija del “Cagachín”, un labrador de mimbre que vendía canastos al barrio. María dominó la zambra en los tablaos del Sacromonte en la mejor época del flamenco; cuando se dio a conocer a principios de siglo y el mundo entero lo demandaba. Su figura, estilo y raíces pronto la descubrieron como una artista inimitable que introdujo su humilde barrio en el panorama mundial de la música. Hoy en día su cueva en el Sacromonte permanece “tal como la dejó”, conservando su inconfundible presencia.
Gran Capitán: ¿Os suena la cabeza de Colón, que preside la rotonda del Triunfo al final del bulevar? Pues es la del Gran Capitán. Gonzalo Fernández de Córdoba, héroe de la reconquista granadina, tiene su busto en la Avenida Constitución desde 2010. Su autor, Miguel Moreno, quiso dejar plasmado el gran intelecto del Capitán mediante un curioso oxímoron: dejar la cabeza de la estatua hueca por detrás.
El misterio estuvo rodeando el acto durante el día de la inauguración, ya que la estatua permaneció todo el día con una sábana roja por encima. Fue la atracción principal de la primera jornada de las estatuas en Constitución (ya que fueron instaladas el mismo día). Por algún motivo que se nos escapa, con el paso del tiempo la mayoría hemos acabado conociendo dicha estatua como “la cabeza de Colón”, aunque pertenezca al general de guerra cordobés.